El negocio es un sitio interesante para visitar, con dibujos y pinturas muy interesantes de Oriente. Además, está bien ubicado, con una restauración excelente. La información proporcionada en la entrada sobre lo expuesto es interesante y los aseos están impecables. La vista desde el Castillo es una maravilla y el día ayudó a disfrutar aún más de la experiencia.
El negocio tiene un horario limitado para el pase guiado, lo cual puede dificultar la visita para aquellos que no lleguen a tiempo. Además, en algunos casos se recomienda hacer reserva, lo cual puede ser un inconveniente para aquellos que no planifiquen con anticipación. Por otro lado, algunas opiniones mencionan que solo se pudo visitar una sala abierta con dos ambientes, lo cual puede resultar limitado en comparación con otras exposiciones. Por último, aunque no se menciona en todas las opiniones, en algunos casos se visitó en días laborables, lo cual puede ser un inconveniente para aquellos que trabajen durante la semana.